28/2/2024 - 00:39 -

Mostrando facetas de su mejor tenis, Juan Mónaco hilvanó su tercer triunfo en el ATP de Buenos Aires y consiguió instalarse en semifinales.- Mañana enfrentará a Nicolás Almagro.

Tras el éxito inicial ante el también tandilense, Máximo González (VER) y el posterior frente al mejor argentino del ranking, Leonardo Mayer (29º, VER), Piquito (60º en el escalafón internacional) superó en el compromiso de cuartos de final al uruguayo Pablo Cuevas (24º y principal raqueta de Sudamérica) definiendo después de dos horas y 38 minutos por 7/6 (1); 6/7 (4) y 6/4.

Muchas aristas surgen para el análisis en la semana que llamativamente Daniel  Orsanic, capitán argentino de Copa Davis, decidió dejarlo fuera del equipo que enfrentará a Brasil. Pero al margen, sobresale que Mónaco venció consecutivamente a dos rivales ubicados en el Top 30, algo que no lograba desde que en octubre del año pasado derrotara al canadiense Milos Raonic (entonces 8 y hoy 6) en el Masters Mil de Shanghai. Además representa su primera semifinal de la temporada y la segunda desde septiembre de 2014, cuando arribó hasta la antesala de la definición en Shenzhen, China.

 

 PARECIA QUE LO CERRABA ANTES  

Campeón de la edición 2007, en el segundo set Mónaco tomó ventaja de 5-2 -aunque un solo quiebre- y si bien Cuevas sostuvo su servicio el tandilense quedó al saque 5-3. Pero el batallador uruguayo  protagonizó una gran reacción y resolvió  su favor en el tie break, forzando el capítulo de desempate.

En el parcial decisivo, la paridad se mantuvo hasta el 4-4, pero en el noveno game  Piquito se llevó el saque de su oponente y luego acabó cerrando con absoluta autoridad.

“Hace un par de semanas que me venía sintiendo bien. Tenía que trasladar todo lo bueno que estaba haciendo en los entrenamientos. Con un poquito más de confianza, mi juego fluye mejor. Estoy muy emocionado, contento, volviendo al nivel. Comienzo a tener sensaciones muy buenas y es lo que más feliz me hace dentro de una cancha”, afirmó Mónaco tras deshacerse de Cuevas y transformarse en uno de los ocho mejores del certamen porteño, muy significativo para él, pues en 2004 -en este mismo escenario- obtuvo su primer triunfo ATP venciendo al ecuatoriano Nicolás Lapentti y en 2007 se consagró campeón, festejando el primero de sus ocho títulos en el circuito, ganándole la final al español Nicolás Almagro, justamente su rival de mañana en semis.

Además hizo final en 2009 (perdió con Tommy Robredo) y fue semifinalista 2010 (con Juan Carlos Ferrero).